¡Muy buenas! Me puedes llamar Moisés sin problema, faltaría más. De nombre artístico: Moisés P. Sánchez.

         Bueno, nunca he sentido la necesidad de presentarme bajo ningún otro nombre, creo que no hay nombre más sincero que el mío para presentar lo que yo soy.

         Pues la verdad es que me han dado muchos consejos a lo largo de mi carrera, algunos buenos y otros no tanto, o que no han coincidido con lo que yo como persona quería conseguir a través de la música. Quizás el mejor consejo que me han dado nunca es que no se me ocurriera tomar un camino en el que no me viera yo reflejado, que siempre intentara ser honesto conmigo mismo, embarcarme en proyectos que me dieran la oportunidad de serlo y en los que yo creyera firmemente. Al principio de mi carrera toqué mucho con un gran guitarrista que se llama Chema Vílchez, y una de las frases que él solía decir y que más caló en mí era la de que: "uno toca como es, y que eso no se puede ocultar, quieras o no, por lo que cuida primero la persona que eres porque tu música y todo lo que propongas no deja de ser una prolongación de ella".

         Principalmente para mí. Llevo ya tres discos editados (Adam The Carpenter, Dedication y Ritual) con mi trío de siempre y con el que llevo más de diez años trabajando juntos. Son Toño Miguel al contrabajo y Borja Barrueta a la batería. Ahora mismo en Enero grabo mi nuevo trabajo a piano solo en Italia, y luego trabajaremos en el nuevo disco del trío. He trabajado y trabajo para otros músicos de géneros tan dispares como el Rap (Nach), el flamenco (Serranito), clásica (Ara Malikian), y un largo etc… pero nunca pierdo de vista lo que para mí es más importante, que es intentar sacar adelante mis propios proyectos.

         Jajaja, sí. Tengo la suerte de poder trabajar tanto con Borja como con Toño, que son músicos que llevan mucho tiempo tocando conmigo, que me conocen a la perfección y están muy habituados a mi manera de componer y de trabajar. Entrar a grabar con ellos siempre es una garantía absoluta. Nos fuimos a los estudios Artessuono en Italia, contratamos dos días para grabar todo el disco y ¡¡nos sobró una tarde entera!!

         Consumir se me hace muy raro a la hora de decir que escucho música . El hecho es que escucho muchísima música, de muy diversos géneros sin ningún tipo de problema. Puedo estar escuchando a Sigür Ros, después ponerme el último disco de Brad Mehldau y terminar escuchando una banda sonora de Thomas Newman. Me encanta la música en toda la grandeza de su término, e intento no ponerme barreras de ningún tipo, simplemente fluir con lo que me gusta o no, independientemente de su género y su procedencia.

         Me siento más cómodo en el jazz que en ningún otro, básicamente porque me permite improvisar y conectarme conmigo mismo de un modo que no he podido sentir en otros géneros. Necesito estar creando mientras toco, si no deja de interesarme rápido lo que hago, por lo que te diría sin ningún lugar a dudas que el jazz es mi lugar de momento, aunque tengo una concepción muy abierta de lo que la palabra jazz significa.

         ¡¡Me encantaría tocarlos y comprenderlos todos!! Desafortunadamente, cada instrumento requiere muchísimo tiempo y ya me cuesta estar centrado en el piano cada día y dedicarle las horas que se merece, así que no me planteo aprender a tocar más instrumentos por el momento.

         Pues tengo un Roland V-Synth, un Korg Triton Xtreme y un Kurzweil Sp88. Antes tenía mucha más maquinaria pero fui desprendiéndome de ella poco a poco en función de cómo ha ido evolucionando mi carrera. Ahora he comprado un portátil, tengo un montón de buenos plug-ins y quiero trastear con ello en directo, a ver si para el próximo disco podemos mostrar algo de ese camino.