miércoles, 21 de agosto de 2013

Pianos Petrof

Aún recuerdo cuando mi madre me preparó para mi primera clase de piano. Tendría unos 8 años y después de meses de aburridas clases de solfeo en la academia por fin esa tarde iba a tocar un piano. Por suerte ese día la profesora me puso frente a un Petrof. 

La gente es amante de la calidez y perfección del sonido de los pianos Steinway & Sons, son pianos cálidos, correctos, de un sonido perfecto y quien ha tenido el honor de tocarlos (yo lo más cerca que los he visto es en un escaparate o un escenario) dicen que el mejor sonido los tienen. Hay gente que ama los Yamaha, por su ejecución, su sonido y su más que aceptable relación calidad-precio.

No puedo negar el amor al sonido Steinway, el sampler que más espacio ocupa en la memoria de mi humilde Nord es el de un gran cola de esa marca. No puedo decir que un Yamaha tiene un sonido potente, agresivo, vibrante. Pero lo que de verdad no puedo negar es el amor que les tengo a estos pianos checos. Tengo el sonido de los Petrof grabado en el cerebro desde que mis dedos lo tocaron por primera ver allá por el año 1988, el recorrido tan largo de su tecla, su recuperación lenta, ese golpe tan contundente que daba a la cuerda que confiere un sonido redondo, cálido, contundente, de gran dulzura. Creo que no podría entender el piano sin los Petrof. Mi viejo piano Légnica es una mala imitación de un Petrof, pero la dulzura de su sonido me cautiva, quizás por eso lo elegí entre todos los pianos de la tienda.

Petrof es una veterana marca checa que lleva haciendo pianos desde mediados del siglo XIX, siendo la marca más antigua de Europa que aún produce (junto con Bösendorfer, Steinway o los ya míticos Bechstein).

La apuesta de Petrof por los nuevos sonidos crean en el mundo de la tecla numerosos coleccionistas de joyas antiguas, ya que con el tiempo innovan en la maquinaria apostando por arpas más ligeras y que desafinen menos, así como otros timbres.

Entre los modelos de Petrof hoy día encontramos varios modelos de piano vertical (el grosor de la madera es decisivo a la hora de elegir sonido en este tipo de pianos), unos pianos de cola de gran calidad y con unos exquisitos acabados; e incluso sacaron un piano portátil incrustado en un flighcase, ya ha sido retirado, pero en los vídeos prometía un gran sonido.

Figuras como Renato Carosone apostaron por Petrof, así como otros pianistas de reconocida fama. Quizás nunca tenga dinero para comprarme uno, pero en mi corazón y en mi cerebro llevo su sonido grabado a fuego. En el futuro mi Nord sonará a Petrof, no os olvidéis.

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